El gobierno de Dina Boluarte planea la fusión del Ministerio de la Mujer con el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis). Todo ello, pese a la realidad de nuestro país, donde se registraron solo de enero a julio, más de 36 mil denuncias por violencia física atendidas por el Centro de Emergencia Mujer (CEM), 17 670 casos de violencia sexual y 40 103, de violencia psicológica, según el portal estadístico Aurora.
Mariela Belleza, abogada integrante del colectivo Las Tejedoras expresó su rechazo a esta eventual medida y consideró que de concretarse generaría un impacto negativo en la búsqueda histórica de igualdad de oportunidades.
“Esta fusión se daría sin ningún tipo de transparencia ni informe técnico. Ni siquiera la ministra de la Mujer puede decir en entrevista cuál es el proceso que se está dando, esto es alarmante”, comentó.
La falta de transparencia ha generado también preocupación interna en los trabajadores de ambos ministerios. Mariela Belleza detalló que la medida afectará también a sus trabajadores, pues habrá duplicidad de funciones y habrá despidos.
“Hay una realidad que no se está transparentando y eso es aún más grave, ni siquiera podemos entrar a un debate público sobre la propuesta”, señaló la abogada, durante la quinta sesión del Ciclo de Diálogos Políticos que organiza la Red Micaelas en alianza con la Fundación Gustavo Mohme Llona.
Llamado a las organizaciones
Mariela Belleza explicó que el carácter de este ente rector se traduce en su competencia para diseñar políticas públicas multisectoriales especializadas, para crear normas y herramientas que permitan monitoreos de los compromisos de todos los sectores y niveles de gobierno, además de brindar asistencia técnica para la incorporación del enfoque de género, enfoque de interculturalidad y derechos humanos.
Durante los 28 años de existencia del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, según recordó, no es la primera vez que se pretende realizar esta fusión, cambiarle el nombre o declarar de necesidad pública la creación de otro ministerio. Ante ello, diferentes instituciones emitieron pronunciamientos de rechazo.
El Comité para la Eliminación de todas las formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) reiteró sus anteriores recomendaciones al Estado, instándolo a reforzar este ministerio e incrementar sustancialmente los recursos humanos y financieros destinados al cumplimiento de su mandato relativo a la aplicación de políticas y leyes en pro de la igualdad de género.
“Tampoco sabemos qué pasará con la Ley 30364, que previene la violencia hacia las mujeres y miembros del grupo familiar, porque tiene como ente rector al Ministerio de la Mujer. Estamos perdiendo una herramienta porque es un mecanismo nacional para otorgar igualdad a través del enfoque de género”, cuestionó la representante del colectivo Las Tejedoras.
Frente a lo que se puede hacer para revertir esta situación, Mariela Belleza habló de la necesidad de dar respuesta desde los territorios regionales, para posteriormente articular a nivel nacional con acciones conjuntas: “Al parecer es una decisión del gobierno ir hacia esta fusión, pero todavía no ha sido tomada, entonces aún tenemos un espacio de resistencia para busca revertir esto que ya parece una decisión cerrada”.
* Información producida en alianza con la Red Micaelas.